miércoles, 21 de octubre de 2009

Aclaración importante

Se que muchos, sino todos, los que vieron este titular, de inmediato y antes de leer la nota, deben haber saltado de alegría, o llorado hasta las lágrimas, o las dos cosas juntas (lo cual habla de lo mal que están) pero lamento informarles que no se trata de mi.

Repito: no soy yo el protagonista (Aunque bien podría serlo. La verdad que no sé que tiene el tipo ese que no tenga yo).

Bueno, eso es todo.

Solo quería confirmarles eso para que no se hagan ilusiones en vano (por las dudas de que, aún después de leer la nota, sus incontenibles ansias de saber de mi les hagan pensar que se trata de un error de redacción y sigan ilusionados con que el programa en realidad es acerca de mi persona. No. Aceptenlón. No es sobre mi.).

Lamento su, seguramente, profundísima decepción.

Que se le va a hacer.

viernes, 16 de octubre de 2009

Pregunta con gustito

Alguna vez, en alguna reunión que ahora no recuerdo bien (no se si fue en la Embajada de Austria o en una cena de gala en algún Consulado) me encontraba yo manteniendo una muy interesante conversación con otros invitados (todo ellos de la mas alta y refinada alcurnia por supuesto) acerca de los gustos gastronómicos predominantes en las distintas partes del mundo, de las distintas influencias que esto ha tenido en las cocinas autóctonas de cada cultura y de cómo la llamada “cocina fusión” se ha popularizado a tal punto, que hoy en día es de lo mas “in” que se puede encontrar en los restós de la mas alta categoría en las principales capitales culinarias del mundo.

En un momento, cuando la conversación fue desviándose hacia los gustos personales de cada uno de los integrantes, yo, elevando mi ceja derecha y sin dejar de revolver delicadamente el hielo de mi whisky con el dedo índice, expresé abiertamente mi agrado por el regusto del Big Mac de Mac Donald’s.

“Discúlpeme pero no le sigo. Le ruego me conceda el favor de explicarme eso” me dice el Embajador de Marruecos, luego de esbozar una sonrisita nerviosa pero sumamente respetuosa, mientras el resto de los interlocutores me observaban en silencio.

“Con mucho gusto Embaja” le respondo mientras me chupo el whisky que humedece mi dedo “A mi me gusta mucho el Big Mac ¿Vio? Es esa hamburguesa doble que es como la “hamburguesa insignia” de Mac Donald’s. Le aclaro por si no suele ir a comer a este sitio con frecuencia”.

“No, la verdad que no suelo” me dice el morocho.

“Bueno, verá...” continúo yo mientras me mando un canapé de langostinos de un solo bocado “El Big Mac tiene pepino, generalmente tres rodajitas para ser mas preciso, y es una de las cosas que le brinda al contenido del emparedado su característico sabor. Pero hete aquí que el pepino, además , al menos en mi caso particular, ocasiona que lo repita durante horas. Y no es que vaya por la vida diciendo “pepino pepino” eh. A lo que me refiero, para ser mas explícito, es a que lo eructo varias veces en las horas siguientes a haber consumido dicho producto”.

“Aja” murmura el Embajador con una mueca de extrañeza en el rostro, mientras la esposa del Cónsul de Mónaco, que se disponía a comer un bocadito de camarones, se arrepiente y lo deposita en una servilleta.

“A lo que me refería la primera vez, es a que a mi me gusta mucho saborear este eructo saborizado por los pepinos, porque me proporciona como un revival del Big Mac que me acabo de comer e incluso, a veces, hasta logra que me vuelva a dar hambre y todo ¿Se entiende?" finalizo yo mientras me escarbo los dientes con el sablecito de plástico que traía el canapé.

El Embajador arruga la nariz sin decir una palabra, mientras la esposa del Cónsul de Mónaco se cubre los labios con una mano mientras hace una pequeña arcada.

El resto de los invitados me mira con una mezcla de asombro y repugnancia y se empiezan a alejar de mi lentamente.

Yo me termino el whisky, hago un par de buches, y me alejo masticando el cubito de hielo.


Esta pequeña y sabrosa anécdota, es solo a título de introducción, solo para dar lugar a la simpática pregunta de la semana que es:

¿Qué costumbre, característica, o gusto personal tienen ustedes que pueda ser considerado, quizás, como desagradable o de mal gusto por el resto del mundo?

Pueden ser completamente honestos. Acá nadie los va a juzgar.

Nadie les va a decir que son uno cerdos sucios y asquerosos, y unos seres tan repugnantes que deberían irse a vivir a una cueva en una montaña perdida en el medio de una isla desierta.

Ni siquiera yo, que soy un tipo refinado como pocos.

Buen fin de semana.



Aviso parroquial: El día lunes próximo estaré publicando en MIB.
A ver si se ponen las pilas y se dignan a pasar eh. ¿O acaso tengo que recordarles que para que me llegue a tocar una moneda debemos juntar muchísimas visitas regularmente?
No quisiera pensar que son todos una manga de egoístas tan grandes que no quieren que una persona tan adorable como yo haga realidad su sueño de vivir sin trabajar.

Por eso, una vez mas, los invito por las buenas.

(La proxima vez no voy a ser tan amigable. No me obliguen a utilizar métodos que no quiero emplear).

miércoles, 7 de octubre de 2009

Crítica de cine: DIABOLICA TENTACIÓN

Si hubiera que resumir esta película en dos palabras, estas serían “¡¡Que buena que está Megan Fox por el amor de Dios!!".
Si, son mas de dos palabras, ya se, pero no importa, así como tampoco importa mucho el resto porque, evidentemente, esta es una película que fue ideada y producida únicamente para aprovechar el gran momento de popularidad que está atravesando la morocha protagonista de “Transformers” y explotar al máximo su increíble (In cre í ble) sensualidad.
Por lo demás, no hay mucho mas para agregar.
“Diabólica tentación” es un típico filme de terror hecho casi exclusivamente para un público adolescente, de esos en los que las situaciones se suceden casi porque si, la sangre sobra por todos lados, y el argumento cae en absolutamente todos los lugares comunes del género y está plagado de pretendidos toques de ironía o humor que, por momentos, rozan el ridículo.

Sinosip

En el tranquilo y alejado pueblito llamado “La caldera del Diablo” (que se llama así por una misteriosa cascada en la que el agua cae a un pozo aparentemente sin fondo y que, junto con el toro de tres pelotas, conforma uno de los atractivos turísticos del lugar) las vidas de sus habitantes transcurren normalmente entre la monotonía y el aburrimiento, mientras que los jóvenes viven preocupándose únicamente por esas pelotudeces que siempre suelen preocupar a los típicos adolescentes de preparatoria que vemos en absolutamente todas las películas americanas, o sea, quien es popular y quien no.
Needy Lesnicky, es una de esas no populares. Es responsable, estudiosa, quedada, y, a pesar de que es medio bagre y casi todo el mundo la ignora (mas que nada por el detalle de que es medio bagre) se enganchó con un flaquito flequilludo bastante bobina llamado Chipp, y ahí anda noviando y teniendo una alegría cada tanto.
Pero mas allá de eso, además, cuenta con la particularidad de tener un poco de chapa prestada, ya que mantiene una estrecha, íntima y muy especial amistad con su mejor amiga de toda la vida, la bellísima, infartante, medio tarada y bastante trola Jennifer Check, la líder de las porristas del colegio y, por ende, la pebeta mas popular del arrabal y esa a la que todos le quieren sacudir las cascarrias.
Así, Needy y Jennifer son lo que se conoce como “B.F.F.” o “Best Friends Forever” (Mejores Amigas para siempre, o lo que acá se traduciría como “Están a un paso de hacer la tijereta”), y de hecho son tan íntimas que, incluso, por alguna causa que nadie se molesta en explicar, Needy siempre puede presentir cosas sobre Jennifer (Lo cual, en el pueblo, dio motivos para que las malas lenguas anden comentando que son medio papa y huevo, pero bueno, en los pueblos son así, chusmas y mal pensados).
Todo venía así de aburrido hasta que, un buen día, la muchachada se revoluciona ante la noticia de que una banda de rock de cierta fama venía a tocar a ese pueblo de porquería.
Al enterarse de esto, Jennifer, que siempre andaba caliente, le dice a Needy que se olvide de hacer planes con el pescado del novio para la noche, porque la tiene que acompañar al club donde iba a ser el recital.
La gansa de Needy obviamente acepta (las amigas feas siempre hacen lo que la linda dice. Generalmente además de feas también son medio boludas) y esa misma noche las dos terminan en una especie de cantina medio perdida en el medio de la nada, que de club tenía muy poco.
De todas formas, ni bien aparecen los miembros de la banda, Jennifer, que era mas fácil que la tabla del uno, se le va al humo al cantante y le empieza a buscar conversación y a histeriquearlo abiertamente.
“¡Que hacé papi! ¿Como te va lindo? ¿Te vas de viaje? No, por el bulto digo” le dice regaladísima.
Mientras tanto, la pobre Needy, que tenía menos onda que una bandera de chapa y, además, de ninguna manera iba a engañar a su noviecito, se quedaba ahí al costado sintiéndose medio incómoda y con cara de no haber entendido a que bulto se refería su amiga si el chico ese no traía ningún bolso.
En cuanto empieza el recital, Jennifer se pone adelante de todo y empieza a hacerle caritas y a tirarle unas sutiles indirectas al tipo, llevando una de sus manos cerrada hacia su boca haciendo un ligero movimiento de vaivén mientras mueve la lengua por el interior de sus mejillas.
“¿Le estás diciendo que se vaya a lavar los dientes?” pregunta Needy que la observaba medio extrañada y era mas boluda que el agua de los fideos.
“Si, si” le dice Jennifer mirándola con fastidio, mientras sigue entretenida en lo suyo.
En eso estaban cuando, de repente, misteriosamente se produce un cortocircuito y se empieza a prender fuego todo.
En segundos, se desata un terrible incendio que destruye por completo el lugar, y del que Needy y Jennifer apenas logran escapar con vida.
Una vez a salvo, Needy intenta hacer reaccionar a su amiga que parece haber quedado en shock, mientras ve horrorizada como el lugar se convierte en un infierno y hay gente que corre envuelta en llamas y gritando.
De repente, se aparece el pibe de la banda lo mas pancho tomándose un drink como si nada.
“¡Que cagada eh!” dice el muchacho “Decí que salieron”.
“Si” dice Needy “Pero mi amiga está mal”
“Uh no me digas. ¿Sabés que le puede hacer bien a tu amiga?” propone el rockstar “Venir a dar una vuelta en mi camioneta con los chicos de la banda”
“Nonononono. De ninguna manera. Ella no va a ir. Ella se viene conmigo” le responde Needy con tonito de maestra pero, antes de darse cuenta, Jennifer se había subido a la camioneta de los pibes y se había ido al carajo.
Needy se vuelve para su casa muy angustiada y enseguida lo llama al papafrita del novio y se pone a contarle todo lo que había pasado, pero en el medio de la charla siente que alguien le toca frenéticamente el timbre.
Lentamente baja a abrir toda cagada, y, en una escena nunca vista en la historia del cine de terror, cuando abre la puerta ya no hay nadie.
Vuelve a entrar y se va a la cocina a prepararse un fernet para calmarse un poco, cuando de repente se encuentra cara a cara con su amiga Jennifer que está toda sucia, con la ropa rota y casi completamente cubierta de de sangre.
“Uh ¿Qué pasó? ¿Chocaron?” pregunta la pavota de Needy.
Jennifer la mira sin decirle una palabra, se da vuelta, le abre la heladera, le saca un pollo al spiedo que había ahí guardado y se lo empieza a comer ahí nomás en el piso.
“Che, no es por nada pero ese es mi almuerzo para mañana. Si tenés hambre decime y te preparo algo. Me parece que es medio desubicado de tu parte agarrar comida de mi heladera sin pedir permiso ¿viste? Esto no es un tenedor libre. Además usá un plato por lo menos. No seas sucia” empieza a decir Needy en un tonito muy fastidioso, pero Jennifer la interrumpe pegándole un alarido monstruoso en la cara.
Después se ríe, le vomita todo el piso, se saca un moco, se lo pega en el pelo, le dice “Chau” eructando y se va medio tambaleando.
Needy se queda pasmada y pensando en el garrón que iba a ser tener que limpiar todo ese chiquero pero, también, como era sumamente perspicaz, sospechando que algo raro pasa con su amiga.
Al otro día, vuelven a encontrarse en el colegio, y, para sorpresa de Needy que ya no entiende nada, Jennifer está reluciente, deslumbrante y mas perra que nunca, actuando como si nada hubiera pasado, y totalmente ajena, además, al ambiente de pesar que reina en el ambiente debido a la tragedia del incendio.
Días después, y tras sucederse otras misteriosas y terribles muertes de hombres jóvenes, Needy comienza a tener extraños presentimientos y a ser perseguida por unas perturbadoras visiones de Jennifer en una versión demoníaca, por lo que deberá dejar de lado sus sentimientos para intentar descubrir que es lo que se oculta detrás del angelical rostro y las perfectas curvas de su mejor amiga.

Y desde aquí hasta el final, todo comienza a girar sobre lo mismo, hasta llegar a un desenlace tan poco elaborado y tan carente de originalidad que, fácilmente, uno lo puede presuponer sin demasiado esfuerzo casi desde el principio mismo de la película.
No conformes con eso, guionista y directora ofrecen una trama que carece casi por completo de “climax” ya que el misterio de la historia queda develado rápidamente, y únicamente se logra mantener algo de interés por el hecho de tener que esperar para saber que es lo que pasó con la protagonista luego de irse en la camioneta con los muchachos de la banda.
Mas allá de eso, el argumento no logra profundidad en ningún momento y solo se sostiene por las escenas de pretendido suspenso y los, por momentos, exagerados toques gore de ciertas escenas. Quizás la cosa podría haberse salvado con unos buenos efectos especiales, pero estos no solo no le aportan nada al relato, sino que son de una factura bastante pobre y no van mas allá del nivel de lo que podría verse en cualquier capítulo de la serie “Supernatural”.
La banda sonora, por otro lado, se nota innecesariamente estridente y únicamente sirve para hacer que todo termine pareciendo un largo video clip.
En cuanto a las actuaciones, obviamente el punto fuerte es la participación de Megan Fox, en el papel de Jennifer Check, y por punto fuerte no me refiero a su desempeño, por supuesto, que deja bastante que desear, pero eso, en definitiva, no le importa absolutamente a nadie. Lo importante es que la mina está tan pero tan buena, que toda la película se basa en mostrarla con violentos primeros planos y explotando casi al máximo el hecho de que la cámara la adora (al igual que todos los hombres presentes en la sala).
La acompañan Amanda Seyfried como Needy Lesnicky, Adam Brody como Nikolai, Johnny Simmons como Chipp, y J. K. Simmons como el Sr. Wroblewski entre otros.
La película fue dirigida por Karyn Kusama que también ha dirigido cosas como “Aeon Flux” y un episodio de la serie “The L Word” y que, bueno, es una mujer y mucho no se le puede pedir, salvo que sea realista y se vaya a lavar los platos, al igual que la guionista Diablo Cody ya que, ambas, se la creyeron demasiado.

Calificación: 2 Renegados (Regular tirando a mala. Una propuesta de terror adolescente, mediocre y para nada original, sostenida casi exclusivamente por la belleza de Megan Fox).

Recomendaciones: Si Ud. es hombre vaya a ver esta película. Es mala, si, pero Megan Fox es una cosa que no se puede creer de lo buena que está.
Si Ud. es mujer, no vaya, a no ser que quiera salir sintiéndose un bicho canasto y pasar deprimida el resto del día.
Si Ud. es hombre y va al cine acompañado de su mujer, ojo, porque puede ser peligroso el hecho de que no le pueda explicar por que a partir de ver la película, se larga a llorar cada vez que la mira.

Dato importante: Si después de todo esto aún no se decide a ver esta película, solo me queda una cosa por decirle: Megan Fox, en remerita corta, culotte, con medias deportivas tres cuartos, iniciando a su amiga en las delicias del lesbianismo.

Nada mas. Ahora puede decidir.

viernes, 2 de octubre de 2009

Algo para pensar...

”Como es arriba es abajo” dijo alguna vez Hermes Trismegisto en la Tabla de Esmeralda para significar, de forma alegórica, que todo lo que hay abajo, en la tierra, es como lo que hay arriba, en el cielo.

“Como es adentro es afuera” han dicho, a su vez, los sabios hindúes, para sintetizar la enseñanza de que para poder realizar los cambios en nuestro entorno, primero se debe realizar un profundo cambio interior.

Antiguas y profundas lecciones de sabiduría éstas, que lo que han intentado desde tiempos antiguos es hacernos comprender que, en el Universo, todo se corresponde, que todo está inevitablemente interrelacionado, que por mas individualistas que creamos ser, desde el principio y hasta el final de nuestra existencia física, solo seremos una ínfima parte del todo.

Por eso, con estos preceptos en mente, comprendiendo que nuestros cuerpos son en este plano de existencia únicamente los vehículos que se nos han proporcionado para transitar por esta vía a la que llamamos “vida”, y que nuestros pequeños microcosmos personales han de poseer, seguramente, su correspondencia en el macrocosmos que nos rodea, la pregunta hondamente filosófica de la semana es:


¿Es el ombligo el equivalente en nuestro cuerpo del Triángulo de las Bermudas en el planeta Tierra, y por eso es que parece atraer magnéticamente las pelusas hacia los abismos de sus profundidades? ¿Eh?



Se los dejo para que lo reflexionen.


Buen fin de semana.