Es así ...

Yo pienso mucho. Y no lo digo en tono jactancioso, sino más bien todo lo contrario, lo digo hasta con cierto dejo de preocupación y con el ceño fruncido.
La cosa es que cuando entro en ese frenesí de pensamientos, me da por hablarme (mentalmente) mucho a mí mismo, tal vez demasiado. Y lo peor del caso es que me respondo y todo. Me mando unas conversaciones bárbaras. A veces no me doy bola porque estoy en otra, a veces no me soporto y me mando a callar, pero cuando me escucho, hay momentos en los que hasta me doy miedo. Esa "voz" mental interior, la mayoría de las veces no dice cosas buenas. Para ser mas preciso, es bastante mala. Y encima brutalmente honesta. No quiere a nadie; ni siquiera a mí. Un día casi me hago una denuncia por automalostratos.
A veces estoy calmado y solo me digo boludeces, pero cuando me enojo, mi voz interior me deja ver un lado mío que no me gusta.
Me muestra ese lado oscuro que todos tenemos (quiero creer que es así, sino supongo que debo tener un problemita), y que muy pocas veces enfrentamos realmente.
Varias personas me recomendaron que fuera a un psicólogo, sobre todo después de que me descubrieran, mas de una vez, acurrucado en rincones oscuros hablando solo y refiriéndome a algo como "mi precioso".
Sin embargo, esta opción nunca me sedujo demasiado por varios motivos. Mas precisamente dos motivos: primero, porque me insumiría tiempo y dinero, dos cosas de las que no dispongo en demasía; y segundo, porque los psicólogos me parecen unos ladris que arreglan todo diciéndote cosas tales como que te la comés pero no lo asumís, que lo que pasa es que sos un enfermo que se quiere casar con su mamá, o que si en una mancha de tinta ves dos mujeres jóvenes disfrazadas de colegialas teniendo sexo desenfrenado con un pony con traje de astronauta tenés problemas, y cosas así.
Igual fui.

Yo: Buenas tardes Doctor.
Psicólogo: Licenciado.
Yo: No, no. Je Je. No soy licenciado. Soy analista de sistemas.
Psicólogo: No. YO soy licenciado; no doctor. Dígame Licenciado…
Yo: Licenciado…
Psicólogo: GRACIAS!! MUCHAS GRACIAS!! … Bien, ¿Qué lo trae por acá?
Yo: Tengo miedo de estar loco. Me hablo solo.
Psicólogo: Bueno, eso no es tan inusual. Pero empecemos por el principio.
Yo: Bueno. (Salgo del consultorio y vuelvo a entrar).
Yo: Buenas tardes Doctor.
Psicólogo: Me refería al principio de su caso. Hábleme de su vida.
Yo: Ah, ok. Mi papá conoce a mi mamá allá por el año…
Psicólogo (suspirando): No vayas tan atrás…
Yo (acercando la silla): Así está bien?
Psicólogo (algo molesto): Hablame de tu vida, pero empezando por tu infancia.
Yo: Bien. Para empezar, fui chico durante toda mi infancia. Y después bla bla bla. (Le resumo mi vida desde mi infancia hasta la actualidad, sin repetir y sin soplar, durante 35 minutos).
Psicólogo (muy concentrado, casi parece dormido): …………
Yo: EJEM!!
Psicólogo (disimulando un bostezo): Anjá.
Yo: ¿Y?
Psicólogo (arqueando las cejas y refregándose los ojos): Lo que pasa es que tenés una homosexualidad reprimida.
Yo: ¿QUEE??? ¿Me está tratando de trolo?
Psicólogo: No, no ... Bueno, básicamente… si. Además, se manifiesta claramente un deseo inconsciente de asesinar a tu padre para casarte con tu madre.
Yo: ¿Cómo?? Mirá, me parece que tenés que correr el tacho porque estás meando afuera man. ¿En que parte dije eso? Además no tiene ni lógica. Y además te estás contradiciendo.
Psicólogo: No, no lo dijiste. ¿Lógica? No hace falta. Y si me contradigo no te importa. El psicólogo soy yo así que seguro que debe ser así. Se terminó el tiempo. Son 50 pesos.
Yo: Pero vos tenés que escuchar lo que digo yo y sacar tus conclusiones en base a… ¿¡¿¡50 pesos!?!? ¿¿¿¿Qué rompí????
Psicólogo (frunciendo en ceño): ¿¿Me vas a decir vos como hacer mi trabajo pibe?? ¿Quién es el psicólogo acá??
Yo: No, pero….
Psicólogo (resoplando medio molesto): 50 pesitos, vamos …
Yo: Pero al final no me dijiste nada. Mirá, yo vine porque me hablo solo y….
Psicólogo: 50 pesitooooossss, vaaaaamos que se me hace tardeeeee….
Yo: Pero, pero … mi problema …
Psicólogo (levantando la voz): 50 pesitos querido, vaaamooooossss!!!! …
Yo: No, mirá … me parece que me estás cagando…
Psicólogo (buscando algo en el cajón): Aaahhh, así que además de loquito y degeneradito, te querés pasar de piola y no me querés pagar?????
Yo (poniéndome de pie y yendo hacia la puerta): No, no es eso .. lo que pasa que…
Psicólogo (apuntándome con un bufoso): Dame mis 50 pesitos loco de mierda!!
Yo (rezando mentalmente el Padrenuestro): Pará loco, calmate …
Psicólogo: (moviendo el arma de un lado al otro con cara de loco desorbitado): daaaaaleeeeeeeee … los cincuentaaaaaaaaaa….. Que me pongo nerviositooooooo!!!…
Yo: Pe, pe, pero doctor…
Psicólogo (gritando sacado): SOY LICENCIADOOOO!!!! LI-CEN-CIA-DO!!!
Yo (ganando la puerta a toda velocidad): AUXILIOOOO!!! ESTA LOCOOO!!!
Mi voz interior: TE DIJE QUE ESTO ERA MALA IDEA PEDAZO DE PELOTUDO!!!!! SIEMPRE HACIENDO CAGADAS!!!! OJALA TE PEGUE UN TIRO EN LOS HUEVOS ASI APRENDES, BOLUDO!!!!!
Yo (corriendo y llorando como una niña): Perdonameeeeeee voz interiorrrrrr ….
Psicólogo: El que sigueeeeeee……

En fin, como no resultó, y además como casi no salgo vivo de la experiencia, decidí que va a ser mejor que trate de resolver mis problemas como habitualmente resuelvo todo en mi vida: solo y a los golpes.
Por eso voy a inaugurar, a manera de auto-terapia, una sección (esssta) en la cual irán las transcripciones en tiempo real de lo que esté pasando por mi cabeza en instantes determinados.
No habrá aquí un guión, ni lógica, ni literatura, ni coherencia, ni nada de eso. O tal vez sí, no sé. Depende.
Solo serán frases, ideas y pensamientos de lo que sea y como salgan. Uno atrás de otro como puteada de tartamudo. O quizás no, tampoco sé.
Quiero hacer como una especie de catarsis por escrito, aún sin saber bien exactamente que es una "catarsis".
Por ahí me sirve o por ahí no, pero de una u otra forma, puede ser un lindo choreo para cuando no se me ocurra nada sobre que escribir.
Aunque por ahí escribo esto solo y nada mas.
No se...
En fin...

Está visto que para lo único que tengo talento, es para inventar las mas variadas maneras de perder el tiempo.

Yo: Je! … Soy un campeón …
Mi voz interior: Callate boludazo!!!